La Sociedad chilena se caracteriza por la disfuncionalidad familiar y es fácil observar pequeñas instituciones estatales, llamadas familias, que tienen a su cabeza a una mujer. El matriarcado aquí y en la quebrá del ají es un fenómeno común que guarda tras la fortaleza de esas féminas un profundo dolor, que se arraiga en el simple hecho de que sus sueños se destruyeron y se vieron solas sin nada más que hacer, que seguir luchando por los que vienen atrás.
Hoy les vengo a contar la historia de amor más hermosa jamás antes escrita: Corría el mes de Mayo de 1967 y en la Universidad de Concepción surgía el Movimiento de Izquierda Revolucionaria de Chile, ella estaba a punto de cumplir un año de vida y él iba por los seis; muchos años tuvieron que pasar para que esta historia se comenzara a forjar.
Él, joven mirista que jamás pisó la universidad, pertenecía al grupo del campesinado recién incorporado al movimiento; ella muchacha común entre todas estaba alejada del escenario político, pero su padre, sindicalista, insistía en la importancia de la consciencia social en la juventud.
En el invierno de 1984 en la mítica población ‘La Victoria’, él burlaba la autoridad en la noche santiaguina y ella dormía en su casa, de pronto el estallido de una bomba la hizo despertar y él corrió a refugiarse en la casa del viejo sindicalista. En ese momento sus caminos se juntaron y creyeron que jamás se iban a separar, pero él a sus 23 años no tenía trabajo y para el viejo comunista, el proletariado era la fuerza de lucha; “Si no trabaja, no hable compañero” solía decirle.
Ante la imposibilidad de concretar un romance que fuese aceptado por la sociedad, los jóvenes enamorados de la vida y de la lucha social decidieron emprender un romance clandestino, tan clandestino como sus ideales y tan fuerte como el amor que ambos tenían. Un martes 13 de Febrero, tras cinco años de fugitiva relación, se juraron amor eterno…
La democracia había llegado y junto con ella la noticia de que venía en camino una hija para el recién formado matrimonio y aunque la democracia parecía imponerse la DINA seguía empeñada en exterminar una raza subversiva que llevaría al país a la ruina, entonces las ‘caras visibles’ del ala más revolucionaria del MIR fueron obligadas a escapar, por su propia seguridad. ¿El destino? La isla, en la Habana vieja nació ella el opuesto radical de su padre, de cabellos rubios y ojos gigantescos, que vino a consolidar el amor y la libertad… ella, Libertad.
Pero el amor por la patria fue más fuerte y en Septiembre de 1992 la familia pisaba suelo chileno, no pasaron tres meses y en Diciembre del mismo año mi padre fue asesinado por un cerdo que junto con su vida, se llevó la de mi madre… La joven de 26 años recién cumplidos se encontró de un momento a otro, con sus sueños en suelo, el amor de su vida muerto y una hija entre sus brazos.
Así comenzó su matriarcado, con esfuerzo, tesón y coraje supo educar en la libertad del ser a la pequeña, pequeña de la que ahora ya no queda nada, porque al mirarme al espejo, veo el fiel reflejo de mi padre mezclado con la blanca piel de mi madre, figura imponente, un metro setenta de puro coraje… coraje forjado por mi madre, la matriarca eterna, la única que en éste comercial día se merece el cielo, la tierra y las estrellas, el abrazo de la esquiva Libertad y un grito que mezclado de rabia y ternura resuena fuerte: “Feliz día Papá”
Que historia ah... y ese "cerdo" también se llevó la vida de tu madre, que claramente no se hechó a morir y siguió asi como tu padre, evidentenmente, la quiso seguir viendo, y que mayor prueba de eso que ver al fruto del amor entre ambos, con ese metro setenta, con una fortaleza increíble, y un corazón gigantesco, por que claro, no hablamos todos los días, pero un te adoro a la semana, traspasa una energía increíble para que otros, yo incluído, tengamos fuerzas pasa seguir día a día =)
ResponderEliminarLa Anito es una bacán, pero bacán. Mándale saludos de esta hueona que no quiere a naideN, pero que se acuerda de ella.
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