Uno, en Dos.

No, no se trata de la fantasía sexual que utiliza de recurso humectante en aquellas noches en que la ausencia se nota; tampoco es la sensación calorífica arriba de los labios, esa que la obliga a cruzar las piernas y contraer los músculos lo más fuerte posible, para luego respirar del relajo; mucho menos es la eterna fugacidad de la pequeña muerte con otro de tantos que han pasado por su entrepiernas, no, no, no, no se trata de eso, de eso ha tenido bastante, cree incluso que le sobra, y se enfada, siente que algo cambia, y no le gusta, no, no, no, así no era antes, pero debe ser mejor hacerlo -cómo dicen algunas sensibles que ella declara odiar- por amor...

No, no, no! tampoco quiere amor, no es sentir que cuando hace frío unos brazos la acogen, no es celar eternamente su figura, no es reprimir las libertades del otro, no es que su vida se transforme en la vida del otro, no es ser dos en uno, no son las madrugadas juntos, no es compartir incluso el cepillo de dientes, no es sentirse atada, no es repetir mil veces aquellas cinco miserables letras que algunas adoran escuchar t e a m o! no, no, no! No es creer que el mundo cambia por qué están tomados de la mano, no es olvidarse del resto, eso no es lo que quiere...

Y quizás, lo que desea es, compartir más que cuerpo y corazón con el otro, lo más probable, es que la pequeñagransuperpotencia quiera compartir con alguien aquello que para ella tiene más sentido y valor: la mente y sus creaciones, los ideales, la lucha, el no darse por vencidos, el saberse libertos y por lo mismo no coartarse entre sí, el disfrutar del sexo casual en la mesa de la cocina mientras todos están en el comedor, como también disfrutar 'haciendo el amor en la playa', vivir con la alegría linda que otorga el saberse libre, pero que comparte su libertad con un 'otro', libre también. Es escuchar mil veces una palabra, no, no, no, no t e a m o! va más allá de eso... tal vez lo que quiere, es que ante el planteamiento de sus ideas le digan: 'la apoyo compañera', y qué quizás, si no fuese mucho pedir, algún día sus oídos puedan escuchar... algo así: 'Si nuestro camino es lucha, y la lucha debe tener motivos, caminemos compañera, el futuro es nuestro´

No es ser dos en uno, es ser uno en dos! Es saber que la pequeña muerte, puede ser eternamente larga, si se comparten ideales, además de noches de lujuria desenfrenada, libertades, romances perpetuos, y vidas propias, que se juntan aveces, para recordarse que existen!

Talvota parla italiano

Música en el ambiente, se escucha “La noyée” de Yann Tiersen, luces apagadas, y la oscuridad de la habitación contrasta con el rojo de las cortinas que cubren grandes ventanales y el blanco de un cobertor que se posa sobre una cama baja de dos plazas, nadie pensaría que al otro lado de las cortinas se logra ver la mejor puesta de sol de Valparaíso. Me tiendo sobre la cama y cierro los ojos, sin importar que el mundo corra rápido allá afuera, cuando no estás todo es distinto… recuerdo tus labios intentando pronunciar de la mejor forma Yann Tiersen, y me estremezco, aquella sensualidad, invade, justo ahora que la soledad se cristaliza más que nunca, entonces, por el goce de las evocaciones y a medida que la música cala mis entrañas sigo recordándote en el intento de pronunciar bien el francés, y así poco a poco, recuerdo cómo se sentía, cuando simplemente éramos uno, solo uno, sin necesidad de los demás, pidiendo que se escuchara poco, para no callar tanto… ruidos exteriores me distraen, pero me niego a abrir los ojos y encontrarme sola, en ésta que fue la nuestra, todas aquellas tardes, dónde preferíamos cerrar las cortinas, nos olvidábamos del romanticismo y nos entregábamos al nosotros, tan nuestro… los ruidos se vuelven más insistentes y se transforman en pasos subiendo las escaleras, pero la sensación gusta, así que los ojos permanecen cerrados, los pasos se acercan, y siento que la cama se hunde un poco, unas manos acarician mi rostro y toman mi larga cabellera, despejan mi oído, se acerca una boca, y con pronunciación excelente, escucho: “ Ti amo con tutto il mio cuore e non posso negare quello che sento per te”, me estremezco, y ya que estamos jugando a ser italianos respondo: “Mi prendi con forza e llevame un viaggio verso il cielo, come ci è dato di sapere, al centro del mio elisir che guarisce le ferite ...” El silencio se vuelve pecado, y el supuesto pecado se vuelve ley divina, ahora les jours tristes, acompañan el movimiento, de dos locos desatados, a los que no les importa que su tiempo haya terminado, que las situaciones fueran cambiando y que el mundo ahora esté al revés, son dos, sólo dos, que juegan a ser uno, y en ese juego siempre ganan, por qué saben compartir, disfrutar, sentir… vibrare!